"No era la primera vez que ibamos al restaurante, todo delicioso como siempre pero esta vez quedamos sorprendidos por el desastroso servicio que echa por tierra la labor de Simone. Un servicio lento pero soportable siempre que vaya unido a profesionalidad, pero no fue el caso. Muy pocas ganas de agradar al comensal y muchas ganas de terminar el servicio, inexperiencia, desconocimiento de la carta, falta de profesionalidad y simpatia etc. El perjudicado, Simone y su grandes platos. Una pena"