"Maravilloso restaurante mexicano con una carta de lo más variada y deliciosa. Es un local cuco y de apariencia modesta desde fuera, pero por dentro es precioso. Tiene una decoración súper chula y está todo muy limpio y bien puesto. Me quedé con ganas de probar más cosas, pero por lo pronto los nachos estaban de muerte. Tienen platos muy innovadores que jamás había visto en otros restaurantes mexicanos, como por ejemplo la ensalada de nopales (un tipo de cactus), la cual no dudé en pedirme y que es una auténtica explosión de sabor. Las margaritas que preparan también son impresionantes. Muy buena relación calidad-precio. Los camareros muy atentos y eficientes, te preguntan qué tal todo y si te gusta la comida. A pesar del ajetreo del sábado noche, llevaban a cabo su labor a la perfección. La única pega que le pondría es que la música estaba demasiado alta y había que gritar para poder hablar con la otra persona, pero a parte de eso, un restaurante maravilloso al que no puedo esperar a volver."