"Comida tradicional sevillana y andaluza de las mejores calidades, otros platos más modernos y menos de toda la vida también los hacen muy sabrosos. Los entrantes son potentes y en buenas cantidades, las tapas no son caras y con un par comes sobradamente. Los camareros son extremadamente atentos y muy amables mucho más allá de lo que requiere la profesionalidad de su cargo. Nos han llegado a atender hasta cuatro camareros diferentes y cada uno ha sido más atento y simpático que el anterior. Una experiencia muy muy grata en este aspecto. El ambiente es de barrio, con familias comiendo y disfrutando de la terraza y los interiores. A las horas más puntas se llena más pero no llega a ser molesto. En definitiva uno de los sitios a los que ir si buscar donde comer en la zona de Sanra Justa. Un descubrimiento muy agradable sin duda."