"Mi pareja y yo solíamos cenar o tomar tapas en este restaurante desde hace tiempo. Todo siempre estaba muy sabroso. Sin embargo, hace unas semanas fuimos con otra pareja y pedimos, entre otras cosas, una rosca de carne. Al probarla, los cuatro coincidimos en que la carne no tenía buen sabor. Llamamos a la camarera y le comentamos lo que pasaba, pero esta con muy mala cara retiró el plato que apenas habíamos probado. Luego vino una encargada y nos dijo que la rosca estaba en perfectas condiciones y que nosotros no teníamos razón. No estamos de acuerdo, así que hemos decidido dejar de ir."