"Después de ser durante muchos años auténtico fan de la Tagliatella, me decidí a darle una oportunidad. Sinceramente tengo que reconocer que la comida, especialmente los risottos son de bastante calidad. También están muy bien en cuanto a cantidad pero claro su precio también lo pagas. Para mí, ir a comer o cenar a un restaurante es una experiencia que disfruto desde muchas perspectivas, y cuando me doy ese premio me gusta que sea lo más agradable posible. Aquí viene entonces, el motivo de por qué le doy tres estrellas: en primer lugar nos sentaron en una mesa que estaba rota, se balanceaba como una mecedora, básicamente era imposible comer cuatro personas. Y aunque nos cambiaron a otra mesa sin problema me cuesta entender como en un local así no se solucionan esos detalles ISO facto. Por otro lado el servicio tampoco fue algo para destacar, ya que no solo fue lento y algo descuidado, sino que los camareros, aparentemente la mayoría de ellos con poca experiencia, no sabían ni los propios platos ni vinos que tenían en la carta, por no nombrar algunos fallos a la hora de traer el postre. Que por cierto un sábado a mediodía y a una hora normal ya no tenían ni la mitad de ellos, lo que indica una gran falta de previsión. En resumen sin ser ninguna locura es un local en el que vas a comer bien, pero me quedo con mi Tagliatella."