"Estamos cenando ahora mismo y realmente está todo bastante bueno. El pero es que no se puede decir en la carta “pulpo a la parrilla sobre espuma de patata y traer a la mesa el pulpo a la parrilla sin cama de espuma, sin el más mínimo comentario al respecto. Una vez reclamado, nos traen en un plato de café patatas cocidas aplastadas con aceite de oliva y pimentón. ¡¡¡Un poco de seriedad!!!. En el postre pedimos unas Cañas rellenas de crema con chocolate y el chocolate de la cocina a la sala se ha convertido en toffee. Lo que más me duele es haber elegido este restaurante por tener la Q de Calidad Turística, pero entiendo que estas cosas no deben ocurrir con Q ni sin Q. Me da la impresión que, hasta nunca. Por cierto muy artesanal la factura, pero a estas alturas de la vida, no se entiende una nota de categoría de bar de mala muerte, cuando el cubierto por persona es de 50€."
Quesadilla De Camarones
