"El chocolate es normal, las porras estaban frías. El camarero que está en la caja me preguntó qué iba a pedir y también me ofreció comprar agua. Acepté y me cobró 2,50 por una botella pequeña. Cuando casi habíamos terminado, la camarera nos trajo dos botellas de agua de cortesía y nos comentó que si pedías chocolate, el agua es gratis. Además, una ración de porras cuesta 3 euros y te sirven 3, pero si quieres una más, te la cobran a 1,20. Hay muchas más churrerías en Madrid, no vale la pena venir aquí."