"Me encanta sentarme en este mítico bar de Palma y disfrutar de sus deliciosas tartas. Es un lugar al que siempre regreso. Sus camareros son peculiares y me agrada que siempre sean los mismos, año tras año. Son muy profesionales, lo cual se agradece. Para el lugar donde está, tampoco me parece tan caro, considerando lo que hay por la isla."