"Restaurante impecable en pleno centro de Valladolid. Fui a cenar con un amigo y nos sorprendió la variedad que tienen de romeritos, una especie de montadito alargado elaborados con pan de queso y diferentes rellenos. Probamos cuatro de los que tienen en carta: de pulpo alioli, de secreto, de chipirones y, casi a modo de postre, el de queso de cabra con rúcula y mermelada de melocotón. De raciones, nos encantó la berenjena con miel y la mojama. Todo riquísimo, a una excelente relación calidad-precio. El ambiente es precioso, de estética andaluza, aunque quizás tengas que ir con algo de antelación para pillar mesa. Las comandas salen rápido y la atención de los camareros del local es de 10. Un sitio fantástico para tapear deliciosamente bien!"