"Es un lugar agradable con un servicio rápido y atento. Tomé el menú degustación que desaconsejo. La ostra del Delta con mojito es curiosa y agradable. El micuit de foie está frío de nevera y no se le aprecia apenas sabor, máxime por el coulis de cebolla ahumada que lleva encima y que es excesivamente dulce. El pa bao de papada ibérica también sabe dulce. La croqueta de anguila estaba muy buena pero demasiado sosa. Sal se puede añadir, pero no quitar, me dicen. ¿Cómo añado sal al relleno de una croqueta? De segundo pedí Canelón de pato con bechamel trufada. Muy bueno y original. Pero suerte de un poco de salsa española que llevaba y que estaba un poco más saladita, porque ¿cómo añado sal al relleno de un canelón? El postre tenía muy buena pinta, pero después de tanto dulce, se notaba que le faltaba azúcar. Generalmente, cuando se pide un menú degustación se acaba bastante lleno. No es el caso. Quizá porque no pedí el arroz de segundo. Sin embargo, se nota la calidad de los productos y la maestría del cocinero. Por eso recomiendo, desde mi experiencia, escoger algo de la carta y no el menú degustación que, además, no incluye vino. Pero es un lugar aconsejable sin duda para comer en el Delta. Me quedé con las ganas de probar el arroz. La próxima vez."
