"Hoy hemos venido a comer a este restaurante por recomendación de un amigo y nos vamos algo insatisfechos: En cuanto al servicio, son muy rapidos con la comida, pero esa rapidez empeora demasiado la calidad de la misma. Por un lado, el pollo estaba soso, como si no le hubiesen echado sal. Respecto a la ensalada, estaba muy sabrosa. Las croquetas estaban decentes, pero nada del otro mundo y lo peor fueron las patatas. Madre mia las patatas... Nos las sirvieron practicamente crudas y demasiado aceitosas; es como si hubiesen gastado una hectarea de campo de olivas para hacer estas patatas. No obstante, ha de aclarar que tras informarles de este inconveniente nos dieron unas nuevas, aunque seguian demasiado aceitosas. Este sitio es espectacular para comer, es precioso y el ambiente es muy agradable (siempre que haga buen tiempo) pero cuanto mas se puedan evitar las dichosas patatas, mejor."
