"Fuimos unos compañeros de trabajo a comer. Pedimos menú de 11 euros. No está malo pero tampoco es gran cosa, aunque pensando en el precio pagado tampoco se puede pedir más por ese precio. El camarero simpático, es chino pero habla español mejor que yo. El acuario de la entrada impresiona, no se si da miedo o pena, pero creo que le hace falta algo de limpieza o mantenimiento, no me gustaria ser alguno de los peces que hay dentro, o si acaso que me coman pronto, porque vivir ahí tiene que ser terrorífico!"