"Después de un agradable paseo, paramos de casualidad aquí a tomar una caña y unos mejillones para acompañar, simplemente. Los encontramos exquisitos. Más cabe reseñar la amabilidad, buen trato y profesionalidad de ANA, la camarera. Eso y la calidad de los mejillones, nos hizo quedarnos a comer; Ensalada de salazones, boquerones a la andaluza, croquetas y gambas al ajillo. Todo muy bien cocinado y buenísimo. Sobresaliente en Calidad-precio. Volveremos a probar sus arroces."