Bar Restaurante Angelita

Recomendado 100% comida y cócteles espectaculares en los que se nota la dedicación y la pasión en todo momento. Buenísima atención al cliente.

Coctelería fina, muy fina, a base de los productos de su propio huerto. Una carta diferente y sorprendente. Un trato inmejorable. Dato, sentarse en la barra mola.

Delicioso y maravilloso! Todo lo que se cuenta en las reseñas es cierto! Platos cocinados con mimo y buen gusto! Y los cócteles de la parte de abajo, resultado de una mente brillante! Mezclas súper interesantes y bien conseguidas! Ver carta

Restaurante de calidad con platos cuidados y productos seleccionados. El personal te aconseja muy bien en la selección de vinos y comida. Se pueden pedir bastantes vinos por copa y medias copas, lo que permite una gran degustación. No probamos los postres pero los quesos deliciosos.

Es un sitio fantástico ed Madrid. Las fotos que voy a subir son de un evento fantástico de la mano también de Angelita. Es un ambiente muy acojedor y tanto el restaurante como el cocktail bar son de alto nivel. Especializado en vinos,coctelería y cocina de producto de huerta. Son fantásticos os recomiendo de probar este sitio.

Está bien, pero solo podamos hablar de los coktails ya que solo fuimos de tardeo. En la parte baja tienen reservado para tomar copas y tener un ambiente diferente. Es un local todo en uno. Me dijeron que se come bien, sobre todo el tema de los quesos. Los camareros muy amables, además el producto usado es de ellos, te cuentan el proceso. Ver carta

Angelita es sinónimo de productos frescos y verduras de primera, traídas desde la huerta familiar de los hermanos Villalón en Litos (Zamora). El tomate, cuando es temporada, el pisto y el canelón de rabo de toro son maravillosos. No podéis iros sin probar su coctelería, en el piso inferior, también basada en productos de la huerta, dando lugar a cócteles únicos y deliciosos.

Para repetir mil veces. La atención del personal de 10 y la comida espectacular. Pedimos maridaje con vino (media copa) con cada plato. Tomamos el tomate (solo en temporada, si tienes la suerte de probarlo es un espectáculo), el pisto (especialidad), tataki de bonito (brutal), canelón de rabo de toro (de 10 también) y las natillas de chocolate blanco (perfectas para culminar la comida). Todo con productos de su huerta y de primera calidad.

Un lugar elegante donde el producto y el vino están al centro de todo. Sentado en la barra, pude apreciar todo el esmero que se pone para atender al cliente. Personal atento y a la escucha del cliente. Pudieron hacerme una cata a medida, adaptándose a mis solicitudes. Muy buenos consejos en vinos y quesos. Mención especial para la cava Bebito, el bierzo Massuria y lo mejor fue el maridaje de quesos con el Amontillado Fossi que estuvo excelente con el manchego con trufa y con el comté. (Gracias por el pedazo extra que llego muy bien hasta Bolivia! . Un excelente lugar y un excelente equipo Ver carta