Borgia - Menú

"Llegamos al Restaurante Borgia en Viana alrededor de las 3 de la tarde, que es la hora habitual para almorzar en España. Fue recomendado entusiásticamente por el dueño de nuestro hotel en Laguardia. Viana está a pocos kilómetros al norte de Logroño en camino a Pamplona. Es una pequeña ciudad medieval y el restaurante parece muy común desde la calle. En su interior tiene una decoración moderna y vanguardista y es un restaurante de primera categoría. Es un pequeño establecimiento familiar. No se espera que un restaurante como este produzca comida de la misma calidad que restaurantes como Akelare y Arzak en San Sebastián. En este caso, se beneficiaron de un error de comunicación afortunado. Nuestro camarero hablaba poco o nada de inglés. Le mostramos una frase impresa en español que pretendía preguntarle por las especialidades del chef en el menú. Él malentendió y pensó que le estábamos pidiendo que "trajera los platos especiales del chef". Se dio media vuelta y desapareció en la cocina. ¡Qué maravilloso error fue ese! A partir de ese momento, nos trataron con una sucesión de platos y vinos que estaban entre lo mejor que hemos tenido en Arzak, Akelare, El Bulli, Michel Guerard, u otros restaurantes de alta categoría que hemos visitado. Nunca nos pidió que eligiéramos del menú o del vino y a nosotros no nos importó. La cuenta fue de unos $150 USD y fue una ganga. El primer plato (Tomates Confiteds fríos) consistía en medio tomate fresco pelado y despepitado acompañado de granos de maíz a la parrilla y una deliciosa salsa que contenía trozos de mariscos (difícil de imaginar pero realmente delicioso de comer). Nuestro segundo plato fue una sopa ligera y maravillosa (Sopas de Cebolla). Se puso un tazón de sopa bastante pequeño delante de cada uno de nosotros con una yema de huevo cruda y un pedazo de pan tostado. Luego nos sirvieron una sopera de caldo muy caliente (a base de cebolla). El caldo caliente fue servido en los tazones. La idea era romper la yema de huevo y dejar que se cocinara un poco en el caldo caliente (delicioso). El tercer plato era un hermoso plato con 3 alcachofas bebé frescas del jardín y servidas calientes en una vinagreta de aceite de oliva con una loncha de foie gras fresco y setas frescas y salvajes increíblemente deliciosas. El plato principal fue un rack de cordero bebé servido en una maravillosa salsa de vino tinto rioja y acompañado con pimientos rojos y verdes a la parrilla cortados en cuadrados de medio centímetro. El cordero era de color blanco y delicioso. El vino era un reserva de Rioja tinto de la Bodega Ondarra que está ubicada a unos 400 metros del restaurante. Fue uno de los mejores vinos españoles que hemos probado. El postre consistía en higos frescos sobre una cama de queso fresco local mezclado con nata montada y cubierto con una salsa de moras frescas. Al igual que todos los otros platos, el postre era delicioso. Nos obsequiaron con un vino de postre (Pedro Ximenez NEO). Disfrutamos tanto de la comida que pedimos tomar una foto del camarero y el personal de cocina. Posaron con gracia y se sintieron halagados al saber que nos gustaba tanto la comida (les dijimos que anteriormente habíamos visitado los grandes restaurantes de San Sebastián y considerábamos que su comida estaba a la altura). Les encantó el halago y nos presentaron una botella de vino de postre hecho localmente para disfrutar cuando regresemos a Texas. Esta fue una de nuestras mejores experiencias gastronómicas, y una comida verdaderamente excepcional."