"el parador se encuentra en la parte superior de los arcos, en la plaza del cabildo. antes de la llegada Me enviaron un correo electrónico con muchas instrucciones inútiles muy alarmantes sobre la imposibilidad de estacionamiento cerca del parador y la comodidad de aparcamiento en un estacionamiento arreglado y utilizar un servicio de taxi para llevar el equipaje. que implicaría 6 euros del aparcamiento (conveniado) más 6 de carga el equipaje y 6 de regreso con el equipaje al coche al día siguiente, es decir, 18 euros en los 149 euros de la habitación estándar con desayuno de un lunes 20 de junio. Ya pensé que era demasiado, así que subí con el coche a la plaza del cabildo, estacioné el coche y allí lo dejé pagando propina al estacionamiento amateur en la plaza. el interior del parador es sin duda muy agradable, se encuentra excepcional, pero debe ser pequeño, pocas habitaciones y ser sobrevalorado, con mucha demanda. Realmente fui a decir que en mi vida estaba una vez en el parador de los arcos, ya que según amigos, era increíble. Nos dieron la habitación 20, como en un parador añadido reformado hace dos años, muy bien, la verdad es que la habitación era muy buena, excepto los muebles que son de los años 70, armoured estilo español infumable. Por el contrario, el colchón 10, la lencería de la cama 12 y el baño de este 10to dormitorio. el servicio de recepción y excelente bar, también el desayuno, con la camarera muy hábil y eficiente. café posibilidad de muy buena máquina de cápsula. Lo único que se puede ver es que el jamón es serrano, ya no es ibérico, y un poco de indotrial. No escuchamos el restaurante del parador porque la oferta en todos ellos ha sido algo anticuada, casi para extranjeros ignorantes, y a precios de estrella michelín, sin posibilidad de cena de bar, un poco, un sándwich, un bocadillo, algo así."