Casa Corro - Menú

buen estacionamiento, comida casera. Bajo mi humilde opinión el personal carece de un poco de chispa, una sonrisa o una bienvenida nunca se equivocan.

Lo que no puede ser es que digan que están abiertos, viajamos desde Alicante y al llegar nos encontramos con un cartel que dice que están de vacaciones.

Mejor cambiar imposible. He sido deslumbrado por mejoras en el bar y salones, manteniendo su cocina tradicional de calidad y precios populares como siempre. por un par de años que no he venido, gracias por tu amabilidad.

Comida en el lugar Tipo de comida: Almuerzo Precio por persona: 20–30 € Comida: 5 Servicio: 5 Ambiente: 5 Platos recomendados: Arroz En Costra Espacio para estacionar: Abundante estacionamiento Opciones de estacionamiento: Parqueo gratuito

Restaurante de toda la vida, pocas opciones vegetarianas pero lo que me pusieron estaba bien y se nota que la comida clásica también es de calidad. Probé una tarta de Ferrero muy buena. Menú a 12€ entre semana. Recomendable si estás por la zona.

Buen sitio para comer, menú del día o carta. Calidad-precio está muy bien. Service: Dine in Food: 5 Service: 5 Atmosphere: 5 Recommended dishes: Ensaladilla Rusa, Ensalada de Tomate Con Capellanes Y Bonito Parking space Plenty of parking Parking options Free parking lot

Restaurante de referencia en Orihuela, muy bien reformado y decorado, con aparcamiento gratuito y cubierto. La carta es corta pero suficiente; el calamar y tomate con atún salazón son excelentes. El arroz en costra está muy rico. Servicio: comer dentro. Precio por persona: 30-40 €. Comida: 4. Servicio: 4. Ambiente: 4.

con buen estacionamiento la primera impresión al entrar en el local a la zona de bar es la limpieza y la decoración actual que tiene. un camarero nos acercó para ofrecernos los productos al gusto y nos ofreció caldo con bola. Ensalada rusa. esquido de hierro y gazpacho de mero. todo exquisito. Siento que este restaurante es un referente en la zona. personal muy amable y precios muy asequibles.

La camarera nos trajo la carta. Pasó mucho tiempo en el que le preguntamos amablemente por el menú, y finalmente respondió de manera muy seria que no estaba disponible. Luego se fue sin tomar nuestras órdenes de bebida. Cuando regresó un rato después, nos atendió con una clara antipatía, incluso más evidente que la última vez. Creo que es necesario que la camarera descanse un poco. Es posible que la edad influya en su actitud. También es notable que, al momento de pagar, nos dedicó una sonrisa forzada. No recomiendo este lugar. Mejor evítenlo.