Casa Lucia - Menú

Excepcional y la camarera de Pulpo increible,por poner una pequeña pega el bacalao a la plancha estaba salado pero lo demas compensa.

abundante y rica comida. postres muy bien y precio razonable. Buena atención. por poner algunos, pero no admiten una tarjeta. Puedes pagar por bizum.

Hemos pedido paella para cuatro y hemos comido seis, mucha cantidad y calidad. El trato excelente y todo el personal muy agradable, nos hemos sentido como en casa.

de . restaurante amistoso para perros con una espectacular cocina, menú vegano a petición del día anterior. el servicio es superatento. Es un derecho, todo excelente. la relación calidad precio es inmejorable.

Lugar para repetir, de alta calidad para exigentes. Carta con rabas de entrante y rabas de bacalao, si las primeras están buenas, las segundas de quitarse el sombrero, segundos; entrecot y solomillo con hongos, muy rico todo y de gran calidad. Ah y ponen pan de verdad, así da gusto!!

Tenían una carta para los celíacos y muy atentos a esa persona, que agradecemos. la comida era muy buena, ensalada de aventresca, rabia y pulpo para compartir. y luego una ventresca de dos marcas perfecta en su punto, un plato de violación, y dos de singlemillo. lo malo fue que nos llevó a servir, pero como la comida tan buena compenso espera.

Cumplío las expectativas, fue una recomendación y la verdad que estuvo todo muy bueno.El pulpo una pasada, el pescado(en nuestro caso rodaballo)exquisito con una salsa de mantequilla y limón.Ambas elaboraciones hechas a la brasa.La txuleta tierna y con gran sabor. Los trabajadores muy atentos sin sentirles encima, para mi importantísimo.Volveremos seguro!

Encontramos este restaurante al final de un camino difícil cuando estábamos en Castro Urdiales en mayo. Estábamos tan contentos con nuestro almuerzo entonces, que visitamos de nuevo en septiembre en nuestro camino desde Bilbao. No nos decepcionamos, ¡pero nos sorprendió cuando el camarero nos reconoció y recordó dónde nos habíamos sentado! Vale la pena conducir fuera del pueblo y por el camino para disfrutar de buena comida y servicio.

Estábamos en un viaje francés y recomendaron el lugar. sin duda un lugar excelente, la comida es fresquisima y muy buena preparación. Comimos un rodaballo que se quitó la cadera, lo acompañamos de un pulpo a la sartén que parecía hablar gallego y almejas a la sartén. el tratamiento de íñigo, para enmarcar: desde el momento de la reserva a la gestión de la tabla. También tienen aparcamiento y zona de jardín, los espacios están abiertos y un ambiente familiar y tranquilo se respira. a diez. ¡Lo repetiremos y lo recomendaremos con seguridad!