David Freire - Menú

Fuimos por recomendación y recomendamos que todos vivan esta experiencia. es ciertamente una cita para el paladar, cada detalle es cuidadoso. el trabajo que hacen es digno de admirar. No dude y disfrute lo que este equipo nos da. Felicitaciones por el trabajo y placeres que realizas.

Buen trato. Estábamos ansiosos de comer el pastel de carne, que era muy rico, pero lo que realmente ha sorprendido fue el bacalao. super tierna. postre con súper buena torrija. por poner un palo es que tal vez esperaba pagar un poco menos pero tengo que decir que el sitio recomendado.

Buena oferta. Estábamos deseando probar el steak tartare, que estaba muy delicioso, pero lo que realmente nos sorprendió fue el bacalao. Súper rico. Postre con un French toast súper bueno. Para añadir un inconveniente, quizás esperaba pagar un poco menos pero tengo que decir que es un lugar recomendable.

Simplemente genial. Todo cocinado a la perfección, sencillo, delicioso, sin tonterías pero con amor y sabiendo lo que quieres. El establecimiento es un espacio tradicional recientemente renovado que crea una atmósfera perfecta para la comida. Todos los ingredientes para triunfar y convertirse en un referente en la región.

Restaurante con solo 5 mesas. El chef te explica los platos y te orienta. Me gustó especialmente las zamburiñas (no volandeiras) y los tirabeques. Puedes elegir el vino y por copas. Todo cocinado natural y al momento. 3 personas cocinando para ti. Menú de 6 pases y postre, 1 cerveza y 2 copas de albariño.... 70 €. EXTRAORDINARIO.

Pues mi experiencia es positiva. He ido solo una vez y me ha parecido un lugar que ofrece producto de la máxima calidad sin entrar demasiado en elaboraciones complejas ni mezclando muchos ingredientes. La carta de vinos muy completa y el chico que nos atendió y el cocinero muy amables. PD: Las zamburiñas hay que pedirlas aunque no tengas ganas ese día. Por decir algo malo el pan, estando bueno, no me convenció al 100

Para mí, una degustación pésima para los 30 € cuesta. Porciones muy pequeñas, no muy elaboradas y carentes de imaginación para lo que se supone que es un menú degustación, en comparación con la cantidad y calidad que se puede encontrar en los restaurantes de la zona. El pan es muy sabroso, como el café. Hay restaurantes con estrellas Michelin donde, por unos 20-25 euros por persona, se puede comer mucho mejor en términos de cantidad y calidad. Seguramente hay gente que está encantada con la degustación ofrecida en este lugar, pero no es mi caso.

restaurante íntimo y acogedor donde la calidad y el respeto del producto es premium con el valor añadido de tener un servicio tan discreto y detallado como excelente. sentir calidez de tratamiento, cercanía y sencillez donde otros emporios gastronómicos están comprometidos a poner distancia y frialdad. distilando sincera humildad y pasión por hacer las cosas justo frente a otros modelos de gestión que carecen de alma... y ofreciendo absoluta flexibilidad y adaptación al cliente frente a las limitaciones y rigidez de los chefs y locales de la moda, no es fácil encontrar en espacios de este nivel, pero el equipo determinado Ciertamente merecen hacer bien, porque su apuesta combina veracidad, v...

Fuimos 8 amigos a comer, recomendados por amigos y la experiencia fue bastante decepcionante. El servicio comenzó lento, tanto en tomar nuestras órdenes de bebidas, traerlas y en traernos el menú. Entenderíamos si hubiera muchas más personas en el comedor, pero solo había otras 2. Empezamos con el steak tartare, muy poco sazonado y con un exceso significativo de huevo. Luego, el salmón ahumado cortado en cubos, con solo una gota de aceite y ralladura de limón como preparación. Las vieiras estaban casi crudas y no particularmente buenas. Los últimos platos, que eran bacalao y lasaña falsa de conejo, fueron los únicos que valieron la pena. Bien preparados y deliciosos. Terminamos de comer y pe...