"Otros productos que se destacaron fueron las brochetas, que preparan allí mismo en el plato con diferentes sabores para elegir, y cortes de carne de cerdo, ternera o pollo al gusto. En la sección de comida asiática, el pato pekin estaba delicioso y se servía en bandejas, junto a los fideos con verduras y pollo al wok, que también eran excelentes. Los platos típicos, como el ternero con bambú, el pollo agridulce o el pollo con almendras, estaban muy bien para ser un buffet. Además, ofrecían diferentes tipos de papas fritas, que no estaban mal, como alas de pollo, pollo al limón, costillas o platos congelados, así como una opción de postre chino.
De postres, había una selección de dulces y algunos trozos de tartas congeladas bastante decentes, además de rica fruta. En general, fue una experiencia muy buena a un precio súper asequible, ideal para comer hasta quedar satisfechos."