Piccolina, Madrid - Carta

La comida estaba realmente buena, las pizzas son espectaculares y el servicio muy atento. Un sitio para repetir sin ninguna duda. Totalmente recomendable.

El restaurante es acogedor y tranquilo. El servicio es rápido e impecable. La comida es deliciosa, especialmente el crema de calabacín y, por supuesto, las pizzas caseras. Ruben, el dueño, es muy amable y un profesional. Gracias por todo. Volveremos.

Es una pizzería situada en el lateral de la Ilustración con terraza en el bulevar. Alejada de la calle hay que empeñarse para encontrarla. Cocina italiana de calidad aunque un tanto limitada. Buenas pizzas. Trato amable y precios moderados. Buena opción en la zona Ver carta

Somos habituales de la terracita de verano, y hemos vuelto en invierno. La ensalada de burrata exquisita, los raviolis de boletus con salsa gorgonzola riquísimos...macharoni igual. Un escondido restaurante de cocina italiana sólo para los que tenemos la suerte de conocerlo.

Hola, este restaurante nos ha encantado. Éramos una mesa de 19 con diversidad de gustos y al final combinamos su amplia carta y degustado de las mejores pizzas de la zona o Madrid. Ricos antipasti y muy buen servicio para toda la gente que fuimos, aparte de las demás mesas. Muy buena calidad/precio y solo añadir que el vino es mejorable. Lo demás un 8.7. Gracias Picolinna.

El servicio fue lamentable, está claro que las 2 camareras que estaban en la terraza no tienen ningún tipo de formación por parte del dueño ni ganas de trabajar, no conocen ni la carta siquiera. La comida está a la par, por ejemplo la ensalada calabresa consta de 3 trozos de 2cm de 1 tomate y mozarella de la mala fundida en el micro por encima con un chorrazo de aceite...eso casi 10€ Ver carta

hacia siglos que no iba a esta pizzeria italiana. Me pedí una pizza 4 quesos, el sabor era bastante neutro (no destacaba ningun queso por encima del otro), lo que hizo que no la disfrutase. Mi mujer pidió una pizza de rúcula que le encanto. el tiramisú estaba mejor. Si os sirve una camarera latinoamericana (mejor hacerle repetir las cosas, por que es dura de mollera). La musica parecía sacada de un K7 de los 80.

Hoy en día, es un mal presagio que un restaurante que se autodenomine italiano no sirva Spritz... Pero la comida no mejora, solo pedimos pizza, pero la masa no es buena, nada que ver con lo que encuentras en Italia, sino con cualquier pizzería promedio en España. La tacañería para completar la pizza con los ingredientes deseados merece un capítulo aparte. También echamos en falta la clásica Diavola con salami picante. Lo extraño es que el negocio siga funcionando, hace 20 años podría haber sido considerado un lugar correcto, pero hoy en día está desfasado. Aunque hay que destacar la decoración, de austeridad máxima, pero con un toque de tradicional trattoria italiana.

Hemos ido esta mañana, 4 personas, con una reserva de terraza. Al llegar nos asignan una mesa cuadrada pequeña en la que es imposible que cupieran 4 platos, vasos, bebidas y cubiertos. La terraza es enorme, había sitio de sobra entre mesas y una montón de mesas apiladas sin uso. Nos quejamos y nos dicen que sólo juntan dos mesas para 5 o más personas, justo en la mesa de al lado había 3 personas con 2 mesas juntas, se lo hacemos ver y tras discutirlo, por fin, acceden a poner 2 mesas juntas. Lo que debería ser una comida agradable con tu familia se convierte en una discusión, mal empezamos. Por fin pedimos, 1 entrante y 4 segundos, son las 14:30 cuando llegamos, a las 15:30 vienen los segund... Ver carta