"Había pasado muchos años desde que regresé a este, hoy un restaurante del hotel, y antes solo un restaurante familiar. El cambio que ha experimentado, gracias a Juan (su dueño), me dejó asombrado. Realmente sorprendido en los términos más positivos de la palabra. Tuve la suerte de poder hablar con Juan, quien me explicó que ha estado allí durante 7 años (¡cómo pasa el tiempo!). La verdad es que si alguien no lo conoce, vale la pena desviar el rumbo para ver las mejores y más espectaculares vistas del Estrecho de Gibraltar. ¡Felicidades y, por supuesto, volveremos! ¡Una maravilla!"