"Fui a cenar con unos amigos y lo que menos me esperaba era lo que sucedió... Nos dijeron que teníamos que esperar un momento porque había dos mesas delante de nosotros. Llega una familia detrás y entran primero. No dijimos nada, pero siguieron metiendo gente. Después de esperar media hora, finalmente nos hicieron pasar, tomaron nuestra orden, y tras unos 40/45 minutos, trajeron las raciones. Para mi sorpresa, la ración de alitas consistía en solo 4 alitas y además sabían mal. Las hamburguesas que pedimos las trajeron mal al principio, luego las corregieron, pero la carne venía cruda... La verdad, no volvería. Los camareros parecen no enterarse de nada. En mi vida he visto a un camarero recoger mesas de clientes o atender con tan poco interés como aquí, salvo por dos, los demás no se salvan. Les mencionas que cenaste mal y ni siquiera se disculpan, parece que les da igual. Me parece una vergüenza. No volveré."