"Veo muchas y muy buenas críticas con 4 y 5 estrellas. La dejo en 3 y voy a explicar las razones. Es indiscutible que tiene una buena cocina, los platos que hemos probado han sido interesantes y originales: croquetas, cada una con su salsa, textura correcta y temperatura adecuada; un pulpo seco preparado de forma original, ya que normalmente el pulpo seco solo requiere más preparación que un toque de fuego y aceite de oliva. En este caso es diferente y original: yema de huevo trufada, aprovechando la temporada de trufas. Un plato de simple aspecto, destacando sobre todo la olleta de blat con trufa, es una de las especialidades que queríamos probar, pero no fue de nuestro agrado personal, no podemos pensar en el plato de canelones con trufa. Un plato muy bueno, con sabores marcados, pero suavidad. Por otro lado, fuera de la cocina, encontramos varios detalles que no nos convencieron. Un sitio en el que se busca cierto nivel de cocina, hoy en día no se puede permitir no tener un sitio web en condiciones, con información actualizada y posibilidad de reservas online. La web no tiene información y la parte de reservas no funciona. No nos gustó la prisa que nos dieron para elegir los platos al decir que el restaurante está lleno y tiene que sacar los pedidos. Es un problema organizativo, pero no hay prisa, no es un lugar de comida rápida, y llegamos a la hora de nuestra reserva. No nos pareció bien la forma en que la gente entraba sin reserva. Tenemos que cuidar a todos, darle una tarjeta, decirle que otro día llame y estaremos encantados de atenderlo, pero no decirle sin más... hay un bar en el que el dueño habla mucho, muy rápido y fuerte, y en un lugar pequeño se escucha mucho y es un poco pesado. No es necesario hablar tanto, puede resultar molesto como he visto que ha pasado a más usuarios. Además, es un poco de sobra. Hay muchos lugares hoy en día donde se come bien, por ese precio, por menos y más, un poco de humildad también es buena. En cambio, el joven camarero resultó ser amable y correcto."
