"Déjame decirte como valenciano que nació aquí, pero fue criado en el Reino Unido con la suerte de poder visitar a la familia en esta hermosa ciudad dos veces al año... La Pergola es una institución valenciana. Estaba aquí antes de que yo naciera. Está aquí hasta el día de hoy, y si Dios quiere, siempre estará aquí. Mis abuelos comían aquí. Mis padres y sus hermanos comían aquí, y siempre comeré aquí cuando pase por la ciudad o me quede en ella. Esta no es una reseña monótona porque este lugar es innegablemente confiable y constante. Es porque ofrece comida maravillosamente buena, fresca y casera. Venir aquí para un Almorzaret (mejor versión valenciana del brunch) o para el almuerzo mismo, es para lo que está hecho este lugar. Los bocadillos son perfectos, los entrantes son clásicos valencianos, y el Cremaet (el café matutino de Dios) es uno de los mejores que he probado. Sentarse afuera bajo el sol valenciano, con nada más que un ambiente agradable con zonas de sombra refrescantes, la ubicación también es perfecta, situada en una franja de jardín para pasear. En cuanto al servicio, la gente es increíblemente eficiente. Con la cantidad de mesas que dan vuelta al día, tanto la cocina como el personal de camareros hacen un trabajo fantástico. No hay una fila formal anglosajona para que te pongas en pie, solo tienes que avisarle al veterano camarero David que quieres una mesa, para 'X' número de personas, y esperar. No discutas. No te sientes en una mesa vacía que veas. No te moleste por los tiempos de espera. Simplemente espera, porque la atmósfera casual y relajada que obtienes al final lo vale."
