"No soy un gran fan del cerdo, nos vamos de ese punto, pero no podía ir a un lugar seco y no podía ir a comer el famoso Mes de la capa. si vas a reservar a tiempo, es posible (casi seguro) tocarte pero esperar algunas horas. la ubicación es simplemente perfecta, sólo llegar a una segovia y pasar el acueducto que enfrenta con este restaurante. una vez dentro de la decoración es muy rústica, con fotos y letras antiguas. Se parece a un pequeño lugar, pero no dejes engañarlo es más de lo que parece una opinión personal: si te caes el chochinillo no es malo, muy bien cocinado con una salsa muy deliciosa para mojar, pero creo que ponen poca cantidad para lo que cuesta (y sin ninguna guarnición o acompañamiento). el entrecot si lo recomiendo, lo sirven en un plato muy caliente para que siga siendo poco acompañado de patatas. Pedimos hongos con jugo de trufa, no los recomendé, no encontré el sabor de trufa en ningún lugar y el sabor no era su fuerte. En cuanto al postre del ponche de Segovia es delicioso, pero definitivamente me quedaré con el pastel de manzana (algo que hace), pero viene bañado en una deliciosa salsa de canela caliente. como un regalo que siempre te consiguen con dos tarros por mesa de memoria (con el nombre del mes registrado), un detalle."
