"Dispone de un comedor amplio con grandes ventanales al exterior en el que se está cómodo. La comida, a pesar de que los platos que pedimos no precisaban mucha elaboración, está bien preparada y presentada. A destacar, a mi gusto, el lomo alto y los postres (buenos el tiramisú casero, la tarta fina de manzana y el volcán de chocolate). Correcta atención al comensal aunque los platos, excepto los postres, todos a compartir, llegaron secuencialmente, lo que alargó en exceso el servicio platos más de horas) y presupone una cocina sobreocupada. Es de suponer que se irán corrigiendo estos pequeños desajustes. Precios adecuados. Recomendable."