Solomillo Solomillo
Asador La Chata

Asador La Chata

Bo. El Hoyo, 3, Isla, Spain

Sushi • Europeo • Asiático • Brocheta


"Durante años hemos ido al menos un par de veces cada verano, hasta este año todo estaba bien, con algunos detalles, pero en general correcto... Hoy fuimos con una reserva y, al llegar, la amable señora en el mostrador de la entrada me dijo que no tenía reserva. Mirando en el cuaderno que tienen, señalé mi nombre y, con una mala cara, me dijo: "Está bien, esta mesa aquí se ha cancelado". Hasta ahí, mal pero normal. Nos sentó en una mesa justo detrás de su mostrador en la entrada. Después de 25 minutos esperando ser atendidos, amablemente le pedimos el menú para ver qué comer, y nos lo dio con aún menos entusiasmo y modales que con los que nos sentó. Otros 20 minutos después, nadie había venido a la mesa; ella, sus colegas y el gran jefe propietario Cristóbal de chatara estaban en el mismo lugar (su mostrador). Cuando, de nuevo y amablemente, le preguntamos si podían tomar nuestra orden de bebidas, mirando por encima de su hombro, dijo que sí; se lo dice a su compañero, y oímos cómo comenta a otra señora en su mostrador (reuniones) y hace un gesto con las manos como diciendo "¿y yo qué?". En ese momento, después de casi una hora esperando con nuestros hijos de 5, 8 y 12 años, decidimos levantarnos e ir a otro lugar donde nos trataran como clientes. De un menú que no solemos comer o de la carta, aquí normalmente dejamos entre 200 y 300 euros por comida... No volveremos y nunca lo recomendaría. Como dije al principio, hemos ido casi desde que comenzaron y me parece que, por el ritmo que llevan últimamente, no durarán mucho. Espero que Cristóbal y su equipo tomen cartas en el asunto; he visto caer restaurantes mucho más poderosos en mi vida profesional... de verdad, les aconsejo a ustedes que leen esto que vayan a cualquier otro lugar antes que a este..."

Terrassa 4 Capellans

Terrassa 4 Capellans

Capellans, 4. 08002. Barcelona, Spain

Té • Café • Catalán • Mediterráneo


"Nos encanta probar lugares nuevos y analizarlos. Nuestro trabajo es intentar mejorar los servicios al cliente y aportar consejos tramite análisis y sugerencias sea de forma pública que privada, empezando analizando lo básico. En este caso, un café y su servicio bar. El restaurante-bar parece un lugar, muy luminoso, limpio, de estilo moderno y ordenado. Aun encontrándose en el centro frenético de la ciudad condal, trasmite tranquilidad y seguridad. El chico del bar, que nos atiende, nos atienden con profesionalidad y sonrisa . Eso si, no tienen leche sin lactosa. Nada a que ver con leche de avena.. o otros tipos que nos proponen. Para los clientes con intolerancia a la lactosa, eso representa un problema. Un pequeño detalle, nos sorprende in negativo. Nos dejan sentarnos en la barra, evidentemente preguntamos previamente si podemos y nos indican que si, pero a la hora de sentarnos y disfrutar de nuestro café tranquilamente, utilizan el espacio justo delante de nosotros para poner vasos sucios. Eso se podria haber evitado. Ademas el resto de la barra estaba completamente vacia. Quizas, reservar un espacio solo para los camareros o habernos indicado de sentarnos en otra parte, hubiera sido mejor solución. Observamos tambien como otra persona, probablemente el encargado del servicio bar, para servir a unos clientes una copa de cava, limpia delante de los clientes mismos una de las copas con un spray. Eso también no lo vemos correcto. De hecho los clientes se surprenden tanto cuanto nosotros. Esperemos que nuestras observaciones ayuden a mejorar las expectativas. Volveremos para probar el restaurante y a tomar otro café, esta vez un cortado. Confiamos en las posibles mejorias. Un saludo cordial, PamTours analista de calidad de servicios mejorables y personal shopper"

Depikofino

Depikofino

Eduardo Dato, 29, 41018, Sevilla, Spain

Carne • Tapas • Fusión • Español


"Buscábamos algún lugar por la zona para tomar unas tapas por cumpleaños y nos pareció atractivo e interesante por la carta y fuera de carta. Local con terraza agradable y salón diferenciado en dos espacios, uno más íntimo y apartado de zona principal y el otro que forma parte de la cabecera del local, algo más jaleoso. De ambiente acogedor y decoración rústica urbana, su oferta gastronómica está basada en cocina internacional, teniendo presente platos de cocina tradicional innovada. Éramos un grupo de cinco amigos y decidimos pedir todo a compartir. Nos quedamos con las ganas de probar varios fuera de carta ya agotados, finalmente nuestra elección: Croquetas de caña de lomo y setas con parmesano, ambas crujientes, doradas y cremosas en su interior. Las de caña de lomo suaves y más bien tontas, nos decepcionó. Sin embargo, las de boletus muy ricas, nos gustaron tanto que repetimos. Muy recomendables las croquetas de boletus. Gyozas de verduras, relleno sabroso y contundente. Me gustan las que llevan un toque de plancha u horneado que aportan toque crujiente, como estas. Cerdo sumiso, solomillo de cerdo con salsa elaborada a partir del propio jugo de la carne. Carne tierna y jugosa, salsa no destacable. La presentan acompañada de chips de batata. Tataki de pato con compota de fresas y guindillas, correcto, pero no destacable. Huevos rotos con morcilla de Burgos y lascas de parmesano, combinación acertada y bien rica. Algo corto de sal, pero lo solventamos sobre la marcha, nos gustó bastante. Queso, el mejor postre sin duda. Correcto. En cuanto a carta de vinos, aparentemente es amplia, pero quizás fue puntual del día que estuvimos, pero cierto es, que lo que nos ofrecieron era bien escaso y teníamos poco margen incluso para pedir botellas. Es más, solo ofrecían un tipo de vino tinto por copas (bastante mediocre), cuando en carta aparecen varios disponibles. Lo anteriormente comentado junto a un par de rondas de bebidas y dos botellas de vino ascendió a poco menos de 160€. Como conclusión puedo decir, que si se da de repetir por circunstancias repetiré, pero intencionadamente no lo haré."