"Encontramos este lugar gracias a las redes sociales y su presentación llamativa, su variedad de platos y su difusión nos llevó a probarlo. Un aroma nuevo, casero y atrevido, un estilo de hostelería diferente. Nos dirigimos a Pake Paco Pike que nos acompaña al lugar ubicado en Novo Mesoiro, quizás pueda pasar un poco desapercibido y estar algo alejado del movimiento habitual para los residentes de la zona. El lugar es amplio y bien utilizado, su decoración es sencilla pero atractiva, con un aspecto moderno y creado con estilo. Con el uso del blanco/negro y rojo se crea un ambiente actual, junto con los muebles de líneas rectas y sencillas. Nuestra experiencia en nuestra primera visita ocurrió a mitad de lunes. Cuando llegamos al local nos preguntaron si teníamos reserva, la verdad es que nuestra visita fue impulsiva y no pensamos en reservar de todas formas, nos quedamos en una mesa y aprendimos un poco de su forma de trabajar ya que abren bajo reserva a medias y solo bajo hombres, preferiblemente con reserva. Al reservar lo normal es decir qué platos se van a comer, ya sea porque te dicen los platos por teléfono cuando reservas, o porque los has visto en su Facebook o en su blog. Así que cuando llegas a Pake Paco Pike lo normal es que te esperen. En nuestra visita, el lugar estaba prácticamente lleno. Después de nosotros llegaron varias personas más sin reserva que fueron acomodadas en los lugares que iban quedando disponibles. Lo siguiente fue una ensalada de espinacas, queso de cabra y nueces; revuelto de lentejas, lomo de atún con soja y naranja; cerdo sabroso con yogurt, chocolate y algo de frutas. Muy casero, una ración muy generosa, una ensalada de espinacas con queso de cabra y nueces muy acertada. El queso se presenta medio fundido lo que le proporcionó una cremosidad increíble. Como plato principal, ninguno de los platos del día estaba disponible (los que estaban reservados), así que nos ofrecieron una hamburguesa de ternera 100% casera. La hamburguesa acompañada de espaguetis con champiñones estaba genial. Es casera y su estilo era inconfundible, el tomate deshidratado le daba un toque muy interesante. Nuestra visita no empezó como habíamos imaginado, pero la verdad es que fue muy positiva. Después de nuestra visita nos quedamos con ganas de probar más platos, así que volvimos un sábado por la noche para probar algunas de las propuestas en la barra de tapas. Lo mejor es que te asesoren en tu primera visita. La carta se divide en "pakos" y "pakitos" dependiendo del tamaño, la ración o la tapa respectivamente. Optamos por una serie de "pakitos", quizás no fueron los originales, pero creo que no fallamos en ningún "riojanito" (rebanada de pan, chistorra picada con huevo), "copa de nieve" (en rebanadas de pan, cebolla y rulo de cabra) y por último "timan"."