"Sin duda, uno de los mejores restaurantes a nivel nacional. Todo es de alto nivel: el trato, la calidad del producto, la elaboración, el esmero y la profesionalidad, así como el ambiente. Es claramente un restaurante de lujo, y al hablar con Francis o Gustavo, los dueños, te das cuenta de que su trabajo es su vida y su vocación. Es una parada obligatoria no solo en Burgos, sino que vale la pena hacer una escapada para disfrutar de las delicias que preparan. 100% recomendable."