Asador La Candela - Menú

atención personalizada y comida esqueleto a buen precio

un lugar para comer muy buena carne en las palmas. ¡Todo delicioso!

El domingo de vuelta de jerez de la frontera, paramos a comer en este asador en Palmones. Buena comida y buen precio. Recomendable.

Bueno, caminando por la playa, nos topamos con este restaurante que teníamos un poco de todo, lo mejor de todo era ese sabor de pesca fresca acaba de sacar a sólo 20 metros del restaurante que le aconsejo, pausa, muñeca y soleado!

Bueno, paseando por la playa, nos topamos con este restaurante. Tapeamos un poco de todo, lo mejor de todo fue ese sabor del pescaito fresco recién sacado a apenas 20 metros del restaurante. Os lo aconsejo, ¡paseo, tapeo y solecito!

Un agradable descubrimiento. Conocía de su existencia, pero lo tenía en la lista de posibles. Muy buena comida y buen servicio. Local no muy grande, aunque con mesas en el exterior, pero muy agradable. Gratamente sorprendido. Volveremos.

es un lugar para pedir platos ya que no tiene opción de tapas. la comida era deliciosa, especialmente la ensalada. el único pegamento que tomó un tiempo para servir los platos. También vi el precio elevado porque 2 platos y la ensalada eran 50€?

En primer lugar, tengo que admitir que la comida era espectacular, pero es vergonzoso el tratamiento de los clientes que pedimos arroz para toda la mesa, y toda una atención exquisita y mejor. Pero a 20 minutos de comer, nos dicen que si queremos más arroz, dejaron 3 platos (sí, obviamente). un amigo se acercó para pedir explicaciones del mal servicio y la camarera le gritó; fue a hablar con el dueño, pero entró en la cocina, ignorando completamente al cliente y no dejando que expresara su queja.

En primer lugar, he de admitir que la comida estaba espectacular, pero es vergonzoso el trato a los clientes. Pedimos arroz para toda la mesa, y todo exquisito y la atención mejorable. Pero a los 20 minutos de haber comido, nos comentan que si queremos más arroz, que sobraban 3 platos (ya pasado, obviamente). Un amigo se acercó a pedirle explicaciones del pésimo servicio y la camarera se puso a gritarle; fue a hablar con el dueño, pero este se metió en la cocina, ignorando por completo al cliente y sin dejarle expresar su queja.