Casa Dos Druidas - Menú

Durante el verano paramos aquí y nos sentamos afuera. Los meseros estaban ocupados pero no esperamos demasiado. Tomamos bebidas y tapas y nos sentamos junto a un hongo gigante. No se puede hacer eso en cualquier lugar.

gran lugar, buena comida, buen precio en relación a la calidad, no te doy las 5 estrellas porque creo que con el volumen de personas que tienen deben tener más personal. Aún así, si vas a tiempo, un lugar recomendado para tener una buena comida.

Este lugar es genial de muchas maneras diferentes; muy único por dentro, la comida es fantástica y el dueño fue muy amable. Todo lo que pedimos sabía genial: mejillones, pulpo, vieiras, salchichas, tortilla de patata, pastel de chocolate y pastel de queso.

Sitio original y con algo de encanto. El camarero agradable, pero el servicio es muy lento y la comida es normalilla, el tamaño de las raciones muy justitas. Recomendaría el pulpo con gambas y la tarta de queso da estrada, del resto, nada destacable. No creo que repita.

Sitio enxebre, con encanto y con una decoración peculiar, que si vas con niños, les sorprenderá, por lo que recomiendo su visita. Comida tradicional en el que comimos una zorza y unas zamburiñas de 10, entre otras cosas. Una cosa más, pediros un vino de la casa, os sorprendeŕa

Ambiente muy acogedor y original. Comida casera, recién hecha y muy sabrosa, con producto de calidad. Buena relación calidad precio.Respeto al protocolo covid: nos pidieron el certificado, los camareros llevaron la mascarilla puesta en todo momento y mantuvieron las ventanas abiertas a pesar de no estar muy concurrido a la hora que fuimos. Repetiremos sin duda.

Paramos para cenar una noche y tuvimos una experiencia memorable. El restaurante nos transporta de vuelta en la historia. No podíamos dejar de admirar el edificio y la decoración. La comida estaba deliciosa. Éramos 3 y prácticamente probamos todo en el menú. Todo lo que nos pusieron delante estaba delicioso y fresco. Esta fue nuestra comida favorita de nuestro viaje de 3 semanas en España. Recomiendo altamente Dos Druidas. ¡Estaremos anhelando esta increíble comida y vino hasta que regresemos!

Hemos ido a comer por recomendación pero la verdad no me ha gustado mucho. Teníamos para las 15h y empezamos a comer a las 16h, no se si es lo normal pero en un día como el día de la madre deberían saber que si tienen gente pues deberán de tener más personal en la cocina. En cuanto a la comida las raciones son muy justas y no me ha gustado nada en especial, normalita. Como nota, la tortilla lleva pimiento (no lo dice en la carta). La atención lenta aunque el chico que nos atendió fue muy majo. El sitio es curioso, emblemático pero la verdad no volvería .

Un lugar con un encanto especial. Su emblemático edificio principal, junto con su canastro, te hacen sentir que estás en un lugar diferente. Una vez dentro, la decoración está inspirada en la antigua cultura celta. En cuanto a la carta, diapone de gran variedad de raciones (tortilla, chorizo al infierno, pulpo, calamares, raxo con patatas... Todo ello casero y deilicioso). Los precios son ajustados y te sientes bien atendido. Sobretodo por Manolo, el gerente, el cual te asesora sobre las especialidades con gran amabilidad. En definitiva, un sitio ideal para disfrutar de una cena o merienda con familia o amigos.