Entre Naranjos Los Naranjos

Conocí el restaurante hace un par de años y desde entonces es un sitio obligado. De los mejores arroces que he probado no solo en la comunidad de Madrid sino en toda España. El trato es genial y la dueña consigue que te encuentre como en casa desde el primer momento. MUY RECOMENDABLE!!

Veníamos desde Soria y Calatañazor con bastante hambre, y lo raro fue encontrar este restaurante valenciano y decidirnos por la fideuá, pero no nos arrepentimos, aunque tuvimos que esperar un poquito mereció la pena, exquisita. De postre, tarta de queso y coulant, bien. Valoración muy positiva, una sorpresa.

El restaurante es muy acogedor, y bonito, y la dueña Begoña es atenta y simpática. La especialidad en paella hace honor a ello, las paellas que pedimos espectaculares, pero el resto de platos que pedimos estaban igualmente espectaculares, absolutamente todo. La cocina un 10, y el sitio otro 10...para repetir.. Ver carta

Buen servicio y buen producto. Algo diferente a los judiones y demás típicos de la zona. Pedimos varios entrantes: sepia, croquetas de bacalao (creo que le llaman de otra manera) croquetas de carne de cocido. Seguimos con un arroz seco de pulpo y gambas para terminar con varios postres (brownie, tarta de queso, tarta de limón y crema de naranja) Todo estaba muy bueno, recomendable. Por lo de tema del Covid, creo que tenemos que entender la situación de algunos trabajadores....

Uno de esos sitios que te recomiendan y no sabes cómo saldrá la experiencia. No pensábamos comer arror (a mi mujer no le encanta), pero nos dijeron que salir de allí sin probar un arroz es pecado. Efectivamente, salimos encantados (ella la primera), arroz sobresaliente y atención en sala perfecta. Merece la pena hacer algunos kilómetros. Tampoco esperábamos la sorpresa en la cuenta. Realmente asequible, calidad-precio excelente. Volveremos, claro… y pronto. Muchas gracias por vuestra atención.

El mejor arroz de Madrid, in superable, en todos los sentidos, el lugar es un paraiso, y hace que sea todavia mas bonito por el recibimiento de la propietaria, se deja la piel en cada servicio para que sea el mejor, la comida extraordinaria, platos elaborados con amor y cariño, y Arroces expectaculares, la verdad na tengo nada malo que decir, al contrario, un gran descubrimiento, que el destino me llevo a el, y por supuesto no voy a dejar de ir, aunque me pille lejos de mi vivienda habitual.çMuchas gracias, por hacernos disfrutar. VOLVEREMOS Ver carta

Estuvimos en Los Naranjos en Montejo de la Sierra Madrid. El trato personal muy amable y agradable. Comimos una paella que estaba muy buena y repetiremos otra distinta mas adelante. Los aperitivos, mientras esperas a que se haga la paella (unos 20 minutos), no nos emocionaron, como el esgarrat, que es un plato de bonito de lata con pimientos rojos y las croquetas de pure de patatas, que como nos lo dijeron en Valenciano, ya no me acuerdo. Tiene una terraza muy agradable. El acceso para personas con incapacidad mala. Hay muchas escaleras que subir para llegar al restaurante.

Cuando uno va a esta Sierra bonita, no se espera encontrar un restaurante valenciano de pura cepa. Hoy 5/NOV/2022 después de una magnífica vuelta en bici nos merecíamos comer muy bien, y así ha sido. Para empezar hemos tomado una rica sepia a la plancha y de acompañamiento un ali-oli (o ajoaceite también lo llaman en Valencia), que hacía mucho tiempo no tomaba tan rico. Y como plato principal una paella con carabineros riquísima, el punto del arroz perfecto y sueltecito. Un 10 le damos. Atendidos por una auténtica y aguerrida Begoña con su especial forma de tratar a sus clientes. Muchas gracias por una inolvidable comida valenciana.

En primer lugar decir que lamentamos enormemente el problema familiar que hizo que cocinero y jefa de sala (al parecer propietarios) no estuvieran en el restaurante. Que por cierto, ahora está en Montejo de la Sierra, han cambiado de dirección. Habíamos reservado arroz con una semana de antelación. Al llegar a la hora pactada, sólo hay terraza (con la que está cayendo) no tenían mesas habilitadas en el interior. Se nos informa de la situación: No hay arroces. No hay ningún tipo de carne. Nada de pescado. El jamón sólo lo puede cortar el propietario. Nos ofrecen: croquetas de cocido (cierto regusto al rancio del hueso de jamón) Mejillones. Tellinas o coquinas. Calamar frito (exceso de grasa,... Ver carta