La Casa Del Abuelo - Carta

Personal muy amable y agradable. El cocido estupendo. Repetiremos seguro.

Un lugar ideal para comer, y la muchacha que nos atendió M imi un encanto de chica

La comida estaba bien rica, menos la tortilla, estaba seca. El señor que atiende súper amable. Ver carta

Maravilloso servicio, maravillosa comida, hazte el favor de hacer de esta una de tus paradas mientras estés aquí.

El mejor camarero del mundo José Valenciano y el cocinero Sergio de lo mejor. El abuelo 2. Todo aquel que venga a Madrid tiene que pasar por aquí.

Oasis en zona turística. Tapas frescas y auténticas, bebidas, desayuno también. Buenos precios. Equipo mayor y experimentado que parece querido por los lugareños. Fue un buen hallazgo. Ver carta

Si sentirte “bienvenido” es importante para ti no te presentes aquí. Los camareros en modo automático casi te hacen sentir molesto. Por otro lado, las famosas Gambas estuvieron impecables. El vino de Abuelos con sabor a madera fue increíble.

Podría haber dado menos estrellas. No estaba ocupado. La comida estaba bien. Los camarones a la parrilla estaban bien y sus famosos camarones al ajillo estaban simplemente bien. He comido camarones de mejor calidad en otros lugares. La textura de los camarones al ajillo no era fresca. De ahí tanta agua en el aceite al cocinar los camarones. Un camarero me frunció el ceño directamente a mi pequeña familia cuando pasó y luego habló alegremente con la mesa de enfrente. Fuimos educados, rápidos, teníamos una mesa limpia y pagamos la cuenta. Ganan suficiente dinero como para no preocuparse por los turistas de diferentes nacionalidades. Parece sorprendido de que le haya hablado español. Por favor...

Visitado con un tour de tapas. Este era uno de mis lugares de visita obligada, así que estaba muy feliz de visitarlo. Hay varios lugares en el área y todos son lugares encantadores, pequeños pero vibrantes. El embriagador olor a ajo te recibe desde fuera. Dentro de las ricas maderas y los brillantes azulejos, las fotografías históricas te harán sentir atrapado en la historia y la tradición. Camarones calientes cocinados frente a usted y servidos en platos pequeños burbujeantes en mantequilla de ajo. Servido con pan crujiente para mojar. También probé un vino tinto dulce que venden detrás del mostrador. Muy bonito y embriagador. Disfruté mi visita aquí, te diré que cuando entres, prepárate ya... Ver carta