Los Arcos De Ponzano

Aun teniendo reserva confirmada nos dijeron que no tenían lugar

Me gustó mucho el menú del dia; fabada, huevos rotos, vino y flan. La atención al cliente también muy buena.

Magnífico el cochinillo, magnífico el cordero, magnífico el Pago de Carraovejas, magb8fico el ponche segoviano, magnífica la torrija de sobao. Espectacular. Ver carta

Todo delicioso, la atencion de los camareros muy atenta y educada, amabilidad al 100%! Pedimos cochinillo, tarta de queso y torreznos con limon. Todo fue de 10

Muy buena la comida y excelente atención de los camareros. Exquisitos los torreznos, el jamon, las ensaladas y por supuesto el cordero y el cochinillo buenísimos. He ido ya varias veces y repetiré por que merece la pena disfrutar de este restaurante.

Los Arcos de Ponzano siempre ha sido un buen restaurante, desde que se reformo ha mejorado la calidad de su servicio, los productos de primera calidad y un servicio muy agradable. Es muy recomendable, es importante hacer una reserva. La oferta del plato del día es muy difícil de superar. Muchas gracias. Guillermo Ver carta

el cerdo asado, la cola del toro y el lote solo. razonable. las torretas y el cuchifrito desafortunado. precocintado. el servicio muy atento. el local una caja de sonido y mesas de 60 cm poca práctica además de insuficiente. la acústica es infumable y aprovechar estas fechas para poner tablas o tablas? donde no entran. mala experiencia. No lo repetiremos. Ni tarros de vino. Una pena de lugar.

Le bajo la calificación por el cordero que me sacaron, seco, se hacia bola. No me gusta dejar comida en el plato, pero tuve que devolver a cocina más de la mitad. En familia 8 pax. Todo lo demás, bueno, platos a compartir con raciones generosas y bien elaboradas, morcilla, rabas, croquetas. De segundos. aparte del cordero, cochinillo, exquisito, chuletas buenas, atún muy rico y calamares en su tinta también muy buenos. Servicio aceptable y precios medios a tono en Madrid, unos 45 por persona, con vino

De los tres o cuatro buenos asadores de Madrid éste destaca especialmente por la calidad de su cocina, sus precios razonables y su accesibilidad. Aquí lo que cuenta es el producto. Una morcilla de Burgos casera para abrir boca, bien fritita y con un punto picante, insuperable y nada aceitosa. Y la estrella de la casa, el asado de cordero servido en fuente de barro, bien jugoso y tierno como mantequilla. Imposible acabar el cuarto la paletilla izquiera, mi favorita a pesar del hambre acumulada en previsión. Y la salsa de agua, sal y sustancia corderil (el único sacramento de un asado castellano) para mojar la barra de pan entera. Servicio amable y eficaz, local alto en decibelios como corresp... Ver carta