Mama Chico Corredera Baja De San Pablo

El servicio es excelente, la comida de muy buena calidad, aunque faltaban muchos platos del menú.

Todo estaba delicioso y el servicio, recibimos a David, muy agradable y atento. ¡Sin duda repetiremos muchas veces!

Le comenté a la camarera que nuestro arroz estaba lleno de trocitos de conchitas y no nos hizo caso. Nos lo cobró igual cuando era prácticamente incomestible. Ver carta

Excelente comida, personal muy amable y facilitador. Fuimos una persona más de la reserva y después de esperar un poco, nos buscaron un agujero. Un lugar siempre para volver y recomendar.

Conocimos el otro lugar de mamá Chicó, pero fuimos a éste por un cambio. No nos decepcionó. La comida es una atención exquisita, muy agradable y el ambiente muy acogedor. Definitivamente volveremos.

Nos encantó todo sobre este pequeño restaurante, la comida, el ambiente y la ubicación cerca de Gran Vía. ¡La comida estaba bellamente presentada y sabía tan bien como se veía! ¡Un almuerzo estupendo en medio de un día ajetreado! Ver carta

Maravilloso lugar cerca de la Gran Vía. Ofrecían un excelente brunch a un precio muy razonable. El lugar no estaba lleno, pero casi. El nivel de ruido era perfecto para disfrutar de una agradable conversación mientras esperábamos nuestra comida.

Mi esposo y yo estábamos cenando y la experiencia fue espectacular, no solo por la decoración, la música y el ambiente, sino también por la comida que nos encantó. El picante fue un deleite al igual que los rollos de atún. Por supuesto, quiero destacar la profesionalidad y la atención de David, que hicieron que la cena fuera maravillosa y que queramos repetir una vez más.

A pesar de los pequeños detalles que, en un principio, auguraban una velada algo rara (los precios de la carta de vinos no estaban actualizados, y varios platos de una carta breve ese día faltaban), lo que pedimos estuvo muy bien, sobresaliendo la pizza [la cara que pusieron nuestros vecinos al vernos que la habíamos pedido y la estábamos compartiendo] y los postres. Es un sitio tranquilo y para un sábado por la noche no había ruidos ni estridencias, lo que siempre es de agradecer. Ver carta