Mesa - Menú

maravillosa, gran atención y muy buena comida. Me encanta la merluza, Alangostada o en salsa verde, no lo he comido mejor. ¡Para repetir y recomendar, sin duda!

visita a la reserva vitoria para comer con el niño con intolerancia al gluten, ver la carta y tenía alérgenos bien marcados y una vez allí toda la atención era exquisita variedad de carta y gusto en todos

Comida espectacular, los camareros pendientes todo el tiempo, no esperamos nada entre plato y plato. Comida abundante, con un menú con pocos entrantes sobra, cuando llegas al segundo estás lleno. Relación calidad-precio perfecta.

Hemos comido muy bien y a buen precio, pero si había escogido este sitio y este menú fue precisamente por las chuletillas de cordero, que no he encontrado en otro sitio. Reservé con más de un mes de antelación, y ante mi sorpresa, me dicen que no hay chuletillas. ¡Qué imprevisión!

Cogimos el menú número por euros. Comida muy rica y lugar tranquilo. No le doy estrellas porque el señor que coge las comandas (que además creo que es el dueño) es muy borde y maleducado, parece que te paga por ir a comer ahí... menos mal que solo nos cogió las comandas... Sin embargo el camarero joven muy amable y simpático.

Comida excelente de comida tradicional con un toque propio y sin una carta excesiva con platos sin sentido en este tipo de restaurantes. Con unos platos muy sabrosos y sin precios abusivos. Recomiendo los pimientos rellenos de los mejores que he comido) y la merluza langostada y el chuletón de vaca. Encantado con el servicio que nos dieron.

Estuvimos el sábado pasado y puedo decir que es un buen restaurante para comer pero no le doy las estrellas por dos motivos: El primero el dueño desprendía un olor muy desagradable y era el único sin uniforme. Y segundo la ensalada con escarola y muslitos de ave no estaba muy buena. Lo demás el camarero joven muy majo y la comida estaba rica.

Tres adultos. Tres entrantes a compartir (croquetas, espárragos y jamón ibérico) y tres segundos (ensalada de codorniz, bacalao al pil-pil y delicias de salmón), más piña, tarta de la casa y cuajada, todo delicioso y en su punto. Una botella de Marqués de Cáceres, dos cafés y un chupito de JB: euros. Servicio estupendo. Mantelería de tela. Desde mi punto de vista, mucho mejor que algunos de los tenidos por señeros en la ciudad.

Ir al Mesa siempre es acertar. Su carta con recetas de vegetales tradicionales de la cocina vasca como las pencas rellenas, los guisantes, o las alcachofas es emblemática. Relación calidad precio es uno de los mejores sitios de Vitoria. Además un lugar muy tranquilo y discreto si lo comparamos con su hermano el Conde de Álava, con el que comparte además de la carta, su falta de iluminación natural. Que es el único punto negativo que yo le veo.