"Creo que se merece las 5 estrellas por la relación calidad-precio como restaurante en general. Pero si añadimos la zona infantil y el trato hacia los niños, merecería incluso más estrellas. Celebramos una comunión y los precios fueron muy asequibles. La comida estaba deliciosa; destaco el crujiente de morcilla con manzana verde sobre pimientos asados y los ibéricos, que estaban para chuparse los dedos. En cuanto a los platos principales, la lubina y el solomillo, no sobró nada de ninguno de los comensales. En lo que respecta al menú infantil, ¡les encantó! Además, es muy abundante. El encargado, Joan, fue genial durante todo el proceso, respondiendo rápido a cualquier consulta, incluso en horas inesperadas. También quiero resaltar el excelente trato de la camarera Fátima, aunque el resto del personal también fue muy amable. Definitivamente repetiré, aunque esta vez no habrá celebración, sino que será a título personal."