Venta Melchor - Carta

No hay que dejar de venir. Ambiente magnifico, trato excelente. Todos los platos magnificos. Un diez.

Tal y como su nombre indica, una olla de sabores, ambiente muy tranquilo y acogedor, y servicio súper atento.

Muy normalito para los precios y sobre todo mucho potencial de mejora en la carne, especialmente en la ternera Ver carta

Acogedor, productos de calidad, buen servicio etc... Desayunar en ese patio tan bonito en tu mesa con mantel de tela, tu estufita y ese pan de campo con manteca colora, por solo 3€ excepcional. De mis sitios favoritos.

Lugar agradable para comer. Estaba todo buenísimo, probamos el tàrtar (exquisito), los buñuelos y el borriquete con tomate, los niños se comieron un entrecot espectacular, para rematar la tarta de queso buenísima. Sin duda calidad precio excelente.

Un restaurante espectacular, donde disfrutar degustando platos típicos de la zona. Bordan el atún en todas sus formas y muy rico también el pez cochino y los chocos con tomate. Todo ello culminado con un buen servicio. De lo mejorcito de Conil y alrededores. Ver carta

Repetimos cena en este restaurante de Conil al que solemos ir todos los años. La ubicación no es especialmente atractiva, pero el ambiente, el servicio y la comida nunca decepcionan. Destaca especialmente la calidad del atún encebollado y nos gustaron también los soldaditos de pavia de cazón y el san jacobo de ibéricos.

Otro año más, venimos a Venta Melchor. Este año recupera la quinta burbuja, quien el año 2022 le quitamos. Este año toda la experiencia gastronómica fue perfecta. Ha mejorado mucho el servicio, ya que tiene bastante más personal trabajando. Y se nota. Respecto a la comida siempre destacar el tartar de atún, espectacular. Este año hemos probado el arroz con tomate y gambas, que es muy recomendable (creo que es plato del día) y los garbanzos con Rabo de toro, ambos platos espectaculares. La cuenta, lo de todos los años entre 40-50€. Totalmente recomendable.

Sitio agradable, sobretodo la terraza. Dentro es un sitio bonito pero reverbera tanto que es insoportable el ruido. Yo les recomendaría poner manteles más largos, cuadros, cortinas,… está todo cubierto de cerámica muy bonita pero no hay quien hable dentro, En cambio, en la terraza es un placer. Comida distinta, más elaborada, guisos,… siempre cenamos muy bien. Los garbanzos, el rabo de toro, la lubina ahumada,… tiene platos muy buenos que nada tienen que ver con las puntillitas o el cazón a lo que estamos más acostumbrados a ver. Todos los años volvemos y el que viene no será una excepción. Ver carta