"Fuimos a comer a ese lugar por su ubicación. En general, todo estuvo bastante bien, excepto un plato que pedimos: “Chipirones a la plancha sobre cebolla pochada con tinta de calamar”. En la carta decía que llevaba cebolla, pero al no verla por ningún lado, se lo comentamos a una joven camarera. Su respuesta fue que estaba debajo de los chipirones. Sin embargo, la cebolla no apareció por ningún sitio. Ante esta situación y la falta de interés de la camarera, se lo mencionamos de nuevo con el segundo plato, donde volvió a insistir que sí había cebolla y que se lo diría al cocinero para que nos lo aclarase. Como suele ocurrir, por algún motivo, ya sea un error o falta de materia prima, no pusieron la cebolla. Lo que realmente nos molestó fue la falta de profesionalidad y la falta de iniciativa por parte de la camarera, quien nos mintió y no hizo nada al respecto, lo que también comentó a la responsable, quien igualmente hizo caso omiso. Por esa razón, para lo que sirve, es para no volver a ese lugar, habiendo tantas otras opciones en ese maravilloso pueblo. Esa no es la calidad que se merece Asturias."