"Ese restaurante de toda la vida ha ofrecido comida canaria auténtica, con carne de cerdo espectacular y grandes cantidades. Buena comida a buen precio. Sin embargo, decidieron hacer cambios y ofrecer platos más "elevados" para venderte la comida más cara. Ahora te sirven platos bonitos con más decoración que comida. Los entrantes estaban bien, excepto por los lapas, que estaban quemadas y duras. Pedimos la parrilla para 2 personas a 40 € y casi nos quedamos con hambre. Cambiaron la marinada de la carne sucia y, a nuestro gusto, no fue para mejor. El atún estaba bastante salado debido a la salsa de soya que le añadieron, pero hay que decir que estaba en su punto y el trozo de atún era muy grande (casi prefiero menos atún y un poco más de papas), el pulpo estaba muy bueno y los postres también. Nos cobraron 21 € por el pan que no habíamos pedido, cuando solo había 2 cestas con un máximo de 6 panes en cada una. Al final pagamos alrededor de 300 € por 9 adultos y 2 niñas que apenas comieron. De bebidas solo tomamos cervezas y refrescos. En cuanto al servicio: 2 camareros para esta gran sala me parece muy poco. Al principio todo iba bien, fuimos cuando apenas había gente y la comida salía rápido y con frecuencia. Pero una vez que todas las mesas estaban llenas, ningún camarero pasó por la nuestra. Tuvimos que esperar media hora hasta que finalmente fuimos a hablar con el hombre detrás de la barra que nos envió el camarero. Estaban totalmente saturados, una camarera para las bebidas y la otra para la comida con unas 50 personas en la sala. No quiero decir que sea malo, pero fuimos con ciertas expectativas y nos fuimos decepcionados. Para alguien que nunca ha estado seguro que es muy bueno, pero para nosotros, que conocemos y amamos el antiguo Mandingo, esperábamos comida auténtica y recibimos comida adaptada al turismo. Lamentablemente, no volveremos. Ojalá regresen a lo que eran antes."
Salsa De Soja
