Bodega Fuente De - Carta

Una experiencia muy grata,buena comida,relación calidad precio buena y servido de Txema inmejorable

Un lugar ideal para una cena de un grupo de amigos de entre 4-7 personas, y el servicio es majísimo

Muy recomendado el cocido montañés! Aparte de los huevos rotos muy exquisitos. Tienen muy buena carta. Ver carta

Quiero destacar su queso picón, si no me equivoco es una receta del bisabuelo, espectacular para los amantes de ese queso!! Si vas, verás a gente que va adrede a por el queso!! Yo aprovecho cada vez que tengo gente que visitan Santander.

Bar de toda la vida donde los productos de Liebana y Cantabria son la base de sus comidas: Cocido Lebaniego y Montañés en días alternos. Para postre un queso de Tresviso sensacional y para rematar una suculenta .comida te del puerto con gotas ...

Teníamos muchas ganas de probarlo y por fin lo conseguimos. Todo buenísimo pero ese queso picón y las albóndigas… un espectáculo!!! Espléndido servicio y para ser el centro de Santander un precio excelente. Volveremos seguro, veremos cuando hay hueco …. Ver carta

Mal, muy mal la costumbre de NO coger el teléfono a ninguna hora. Me acerqué hasta allí a pedir para llevar el día siguiente 5 raciones de cocido Lebaniego.Raxipnes muy grandes y todo muy bueno. Tal vez demasiado tocino en el compaño, pero lo dejo a gusto de cada uno. El precio, bien

Si pudiera recomendar este lugar a todo el mundo lo haría. ¡Qué lugar tradicional y pintoresco en Santander! El lugar nos fue recomendado por el gerente de nuestro hotel y no podríamos estar más felices por haberlo probado. Fuimos a almorzar y seguimos la recomendación de queso picón y vino ¡y qué delicia! Tuvimos suerte de llegar en el momento adecuado ya que el lugar se llenó en cuestión de minutos. Genial para observar a la gente y probar platos tradicionales españoles. El ambiente era genial, el personal amable y la comida súper sabrosa. Muy recomendable para un descanso durante el almuerzo o una cena abundante por la noche.

Hemos estado 4 amigos cenando un sábado. Había muchísima gente, pero después de un rato conseguimos una mesa, el camarero súper amable. Pedimos croquetas (de jamón y de carne). Las dos estaban buenas, pero las de carne eran riquísimas, con mucho sabor. Una ración de lacón cortado a cuchillo, nos dejaron el pimentón y el aceite de oliva para que le echásemos nosotros, muy rico. Pimientos verdes con patatas fritas que estaban deliciosos. Una tabla de quesos que traían queso de cabra, ahumado, uno más tierno y un queso picón ESPECTACULAR, RIQUÍSIMO, me faltan calificativos. Las raciones enormes y con dos bebidas cada uno no llegó a 50€. Nos ha encantado. Ver carta