La Tagliatella Muntaner

Vamos a menudo, siempre se come bien y servicio muy atento.

La atención podría ser mejor. No tienen palos. Son detalles de los que se encargarán.

tagliatella está bien establecido como un restaurante italiano de comida de nivel aceptable excelente servicio (nuria) y ambiente familiar. muchos años, comercio y experiencia

¡Sin duda fue el mejor italiano que he probado! Éramos un grupo de cuatro personas, todos muy felices y llenos. Lo recomendaría totalmente, con una gran selección de comida italiana auténtica, de alta calidad y deliciosa.

algunos platos de pasta y pizza y enormes ensaladas (en otros). De hecho, se pusieron tenazas para compartirlas. Un camarero le aconsejará sobre la mejor opción, todo en un ambiente muy cuidadoso inspirado en italiano a un precio muy asequible.

la pasta muy buena como las salsas que la acompañan. las pizzas muy ricas también. el único pero el postre, tomamos el café acompañado de tiramisú y trufas y no estaban hasta el resto, el tiramisú parecía como unas pocas natillas con algo de galletas debajo. el muy amable y amable servicio. un buen lugar para ir con familia o amigos y niños.

el restaurante busca traer a los clientes una filosofía que está un poco a un lado en estos tiempos, para generar y promover un ambiente hogareño, donde la calidad y el servicio marcan la diferencia. la carta se basa en recetas de las regiones del piemonte, liguria y reggio emilia. con una amplia variedad y la característica que se está actualizando cada temporada.

Fuimos con nuestros amigos y familiares y no pudimos averiguar cuál era realmente el problema para que los empleados fueran tan groseros y desinteresados. Parecía como si no tuvieran interés en servir ninguna comida y olvidaron preguntar por elementos especiales de comida. Se tomaron más de 45 minutos en traer la comida, incluso con niños presentes. La calidad de la comida era decente y me gustó el tiramisú. El personal no parece muy entusiasmado en servir. ¡Nunca volveré!

Este restaurante nos fue recomendado por el recepcionista de nuestro hotel. Compartimos el antipasti de entrada donde comimos corazones de alcachofa por primera vez. Compartimos una pizza, lo cual fue una buena idea porque ¡era enorme! Pero absolutamente deliciosa. Pedimos una jarra de sangría de prosecco y de nuevo ¡era bastante grande! ¡Obtuvimos 3 copas de vino grandes cada uno por solo 13 euros! También pedimos postre porque se veía tan bueno. ¡Estábamos absolutamente llenos! Tuvimos un poco de dificultad con el menú ya que estaba en catalán en lugar de español (mi novio no habla español, así que estaba traduciendo lo que podía y usamos la aplicación de Google Translate)