Wineing - Carta

¡Patty Lillina Chef es el mejor en la ciudad! ¡Sin duda alguna! ¡Tienes que probar las albóndigas y la carne roja que es increíble! ¡Es un lugar al que debes ir!

Local muy acogedor, con un trato excelente buena comida aunque un poco escasa De cantidad Al igual que las copas de vino del autoservicio son muy justas a mi parecer. Pero lo recomiendo.

Para “guiris”. Afortunadamente teníamos un vale descuento de THE FORK sobre la comida. Los precios de las bebidas son prohibitivos: una caña 5€ y el vino a cuentagotas es inapreciable y muy caro. Sin embargo, hay que decir que los platos eran buenos, ceviche y burrata excepcionales. No repetiremos. Ver carta

La comida muy bien, probamos camembert gratinado, muy bueno, albóndigas y croquetas de car ne, muy buenas también. Tienen un original sistema de catas de vino, que sirven para probar antes de comprar la botella o para ir probando distintos vinos. No son baratos, pero son buenos vinos. Entre 3 y 8€ la copa . Servicio excelente. Rápido y muy amables

Degustar vinos variados a la temperatura correcta, acompañados de unas tapas de buenísimos productos bien elaboradas y en un ambiente agradable con una música adecuada de fondo es algo muy muy difícil de encontrar hoy en día. La camarera encantadora y profesional. Si te dejas aconsejar, acertarás. Además, no me ha parecido nada caro. Me quedo con ganas de traer a amigos a disfrutarlo. Muchas gracias. #KeepOnLikeThat

Magnífico rincón para comer en la capital en pleno centro. Un pequeño oasis con surtidores de vino nacional,local e internacional.te dan una tarjeta cargada de para los tiradores de vino. Tienes varias medidas para poder probar casi de todo. La comida perfecta, disfrutamos de unas bravas, jamon, taco de costillas. El pan viene acompañado de tomate. postres impresionante con todas las letras. Churros con nata helado y chocolate. Ver carta

La comida estuvo muy bien, aunque es un poco de degustación; la mujer que te atiende es encantadora; el problema está en los precios, especialmente de la bebida, nos cobraron 33€ por 4 cañas y dos botellines. Probamos cuatro vinos y todos estaban calientes, por eso nos pasamos a las cervezas. La cantidad de vino es ridícula. El AN te cuesta 11€ la cantidad mínima, que son, literalmente, dos tragos pequeñitos. Un sitio para los guiris.

Restaurante con una gran cantidad de vinos por copas. El servicio de vinos es self-service. Te dan una tarjeta para poder ir comprando las copas que tienen diferentes precios y medidas, cata, media copa o copa de 150ml. Además del tema vinos la comida y el servicio me parecieron buenísimos. Los camareros muy simpáticos y atentos. Nos hicieron un hueco sin tener reserva. 100% recomendable si te gusta probar vinos distintos en la misma cena

Y un restaurante original para ir con amigos y hacer catas de vinos, te dan una tarjeta y puedes tomar un trago o una copa. La encargada es un encanto aunque no puedo decir lo mismo del encargado, al que tuvimos que esperar un buen rato por un problema con la cuenta, las raciones son muy muy pequeñas para el precio que tienen, pero todo estaba muy bueno, nos podéis perder las croquetas de chuletón, exquisitas. Lo recomiendo para una cata pero no para cenar por el precio de la raciones. Ver carta